Fotobiomodulación: aprovechando el poder de la luz en la degeneración macular seca relacionada con la edad DMAE
Se ha demostrado que la fotobiomodulación (BPM) mejora la calidad de la visión en bastantes pacientes que sufren de DMAE seca.
La fotobiomodulación es la aplicación de luz monocromática al cuerpo con el fin de reparar los tejidos y reducir la inflamación, el edema y el dolor1. Se ha utilizado durante 20 años para el tratamiento del dolor, las lesiones y las disfunciones musculoesqueléticas; para ayudar a la cicatrización de las heridas; para mejorar el rendimiento muscular intenso y reducir el daño muscular después del ejercicio1; y para el dolor neuropático, el linfedema y la mucositis oral2-4.
Varios estudios realizados en los últimos cinco años han revelado resultados alentadores en el uso de PBM para tratar enfermedades oculares, incluida la degeneración macular relacionada con la edad (DMAE)5,6, la retinopatía del prematuro y el edema macular diabético1,7-9. La BPM no empeora la enfermedad, no tiene efectos secundarios y es completamente no invasiva10,11.
Actualmente no existe un tratamiento o cura aprobados para la forma seca de la DMAE, que afecta al 80% de los individuos con DMAE y tiende a progresar más lentamente que la forma húmeda10.
Ondas de luz
La BPM no es una terapia de calor, sino que se asemeja más a la fotosíntesis en las plantas, en que la luz, en el rango espectral del rojo lejano y del infrarrojo cercano, puede estimular las células y conducir a una cascada de reacciones fotoquímicas.
Lo que sucede primero es que la luz de baja potencia es absorbida localmente por la citocromo c-oxidasa. La energía mitocondrial es entonces producida por la liberación de oxígeno, lo que tiene como resultado un aumento de la concentración de trifosfato de adenosina (ATP) y una reducción del estrés oxidativo.
Esta reacción fotoquímica activa las enzimas y los segundos mensajeros, que dan lugar a una respuesta celular e, indirectamente, sistémica en los tejidos que no han absorbido fotones5,12,13. La disfunción mitocondrial y el estrés oxidativo desempeñan un papel fundamental en muchas enfermedades maculares, por lo que la BPM es de utilidad en las enfermedades oculares agudas y crónicas1,5,10.
Ofrecemos nueve ciclos de terapia BPM en aproximadamente un mes. Durante el procedimiento, un dispositivo médico con diodos emisores de luz estimula la función celular y mejora la producción de energía.
Cada ciclo de terapia emite longitudes de onda en el rango de 590-850 nm durante 4 minutos por ojo. Los resultados clínicos se determinan inmediatamente después del último ciclo, después de 3 meses y después de 6 meses, utilizando imágenes de tomografía de coherencia óptica (TCO), la rejilla de Amsler, el gráfico de Pelli-Robson, un gráfico de Snellen y un gráfico de Jaeger.
Supuesto práctico
Se administraron nueve ciclos de BPM durante un mes a un paciente con DMAE seca, tras lo cual la OCT mostró una reducción de las drusas y el paciente obtuvo una mejora subjetiva de la visión. El paciente también experimentó menos cansancio ocular, más contraste de color, mayor definición y mejor agudeza visual sin corregir de lejos y de cerca.
La sensibilidad al contraste mejoró de 1,8 a 2,0 unidades logarítmicas. Los resultados permanecieron estables a los 6 meses de seguimiento.
Este caso demostró un tratamiento no invasivo satisfactorio con una mejor calidad de visión en la DMAE seca. Por lo tanto, la irradiación podría ofrecer un nuevo medio no invasivo y sin efectos adversos para estimular la regeneración de las células madre de la retina.
Conclusión
Hasta la fecha, no hay tratamientos aprobados para muchas enfermedades de la retina. Gracias a su capacidad de promover la regeneración celular mediante ondas de luz, la BPM ha dado lugar a una mejor agudeza visual, sensibilidad al contraste y un perfil macular menos dañado en varios pacientes con DMAE seca.
En general, estos resultados son alentadores. Nuestro protocolo parece ofrecer un enfoque extremadamente prometedor para prevenir que la agudeza visual empeore y para promover la reparación de tejidos en esta forma de DMAE. Además, este método tiene la enorme ventaja de ser completamente no invasivo.
De acuerdo con esta hipótesis, la irradiación a ciertas longitudes de onda puede regenerar las células de la retina. Así pues, la luz modulada puede ofrecer un novedoso enfoque terapéutico válido para la DMAE seca, que tiene el potencial de facilitar la reparación de los tejidos dañados de la retina y promover la supervivencia y las funciones de las células epiteliales dentro del epitelio pigmentario de la retina14.
Autores: Roberto Pinelli, MD, Miorica Bertelli, OD y Elena Scaffidi, MA
Imagen: La mácula (A) antes del tratamiento y 6 meses después del tratamiento (B).
Fotobiomodulación: aprovechando el poder de la luz en la degeneración macular seca relacionada con la edad DMAE.
Traducción: Asociación Mácula Retina.
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