No es ciencia ficción pensar que las células madre puedan reemplazar la retina.
Entrevista con el Dr. Jordi Monés.
Es una eminencia en el mundo de la oftalmología, especialista en enfermedades de la mácula y la retina. Es un gran promotor de la investigación destinada a lograr controlar y a ser posible revertir aquellas enfermedades que pueden afectar al gran tesoro que es la visión.
-¿No valoramos suficientemente la vista? ¿Tendríamos que cuidar más nuestros ojos?
– A cualquier persona a quien le preguntemos si su vista es importante diría que es una de las cosas más importantes, pero es verdad que el ser humano valora las cosas cuando las pierde. Efectivamente, es una discapacidad, una merma en la calidad de vida de las personas que tiene un impacto emocional tremendo en el paciente y su entorno.
-¿Habría que estar más pendientes de la buena salud de nuestros ojos?
-Sí, por dos motivos. Primero, porque hay enfermedades que pueden causar ceguera y son evitables, como el glaucoma o la retinopatía diabética, que cogidas a tiempo son enfermedades amables. Y segundo, porque patologías que hasta ahora no tenían tratamiento y que ahora podemos empezar a controlar, como la degeneración macular, es necesario diagnosticarlas muy precozmente porque lo que podemos hacer con esta enfermedad es detenerla en las formas húmedas, pero si la empezamos a tratar cuando está avanzada, habremos perdido mucho tejido y visión por el camino. Además, es importante mantenerse constante y adherido al tratamiento a largo plazo.
-¿Cuál es la principal causa de pérdida de visión o ceguera? ¿Reside esencialmente en la retina?
-Sí, en países desarrollados, las enfermedades degenerativas de la retina son la principal causa de pérdida de visión. A partir de los 50 años la degeneración macular está asociada a la edad. Si bien es cierto que las formas húmedas las podemos llegar a domesticar, la forma que ha tomado ahora mucha relevancia es la forma seca o atrófica, para la cual no tenemos tratamiento, pero estamos haciendo mucha investigación. Y luego tendríamos las formas degenerativas de la retina es personas jóvenes, como la enfermedad de Stargardt o la retinosis pigmentaria, que causa ceguera total y es una enfermedad para la que aún no tenemos tratamientos eficaces.
-¿Y hay investigación al respecto?
-El camino está trazado, pero se necesitan muchos recursos para hacer investigación y muchas veces éste es el paso limitante, que no tenemos músculo suficiente para poder arrancar proyectos de envergadura teniendo a disposición mucho talento científico
-¿Así algunos pacientes pueden llegar incluso a recuperar visión?
-En la forma húmeda podemos frenar y, en algunos casos, recuperar visión, pero entonces hay que coger la enfermedad justo cuando empieza. En cualquier caso, pararla ya es mucho en una enfermedad tan destructiva. La forma atrófica para la investigación es más lenta y es difícil encontrar fármacos eficaces.
-¿Llegará un día en que todas estas pérdidas de visión serán curables?
-En eso estamos y somos optimistas. No es ciencia ficción pensar que las células madre podrán reemplazar retina y devolvernos función o que la terapia génica nos podrá cambiar la programación de las células. Estamos hablando de 5 o 10 años para poder tener cosas eficaces.
-Por lo que cuenta, ¿el nivel de investigación en España es altísimo?
-Hay centros de excelencia, pero la masa crítica no es la de Estados Unidos. El talento es muy grande pero que no tenemos dinero para costear los proyectos.
A vuela pluma
Jordi Monés, director del Instituto de la Mácula y la Retina y director de la Barcelona Macula Foundation, es un gran promotor de la investigación, en la que confía a ojos cerrados. Su lema es que hay que ir siempre por delante de la enfermedad, por lo que a su entender es clave un diagnóstico precoz y la proactividad. «Hay mucha gente trabajando en ello y cada vez estamos más cerca de tener buenas noticias sobre la curación o tratamiento de esas enfermedades», asegura.